Se trata de una campaña liderada por el estudio de diseño Folch, en Barcelona, y cuyo objetivo planteado consistía en “crear una campaña táctica y al mismo tiempo emocional, sugiriendo la idea de proximidad, lo que nos lleva a otros problemas más importantes como la sostenibilidad, la comunidad y la economía circular“.
Bajo el lema “Compra a prop” (“Compra cerca”), es posible apreciar que las diferentes gráficas están protagonizadas por comerciantes, transportistas y consumidores, actores que se presentan y constituyen una parte esencial en el proceso de reactivación de la economía en la ciudad.
Esta iniciativa ha sido presentada por el Ayuntamiento de Barcelona el pasado jueves 25 de junio, con la intención de promover el comercio local y de proximidad e impulsar la restauración y reactivar el consumo en comercios, bares y restaurantes de la ciudad para que puedan sobrellevar de la mejor manera posible la crisis ocasionada por el COVID-19.
Sin dudas, si bien la estrategia inicial apunta a promover valores de elección de un consumo local ante un contexto de crisis económica como resultado de la pandemia de coronavirus y sus consecuentes impactos negativos en la mayoría de las actividades, la intención es que la importancia ante la inclinación por comercios locales pueda permanecer en el imaginario colectivo de los ciudadanos de Barcelona a largo plazo.
Las diferentes piezas de comunicación creadas apuntan a representar el consumo local como la forma más obvia y razonable de vivir. De esta manera, se ha apelado a la identificación con escenas y personajes ilustrados que reflejan la vida cotidiana.
La simplicidad en el diseño y las formas y espacios de difusión elegidos para los mensajes provocan la empatía con la causa. En alusión a esto, Rafa Martínez, socio director de operaciones y jefe de estrategia de marca de Folch, ha indicado que “a veces la mejor estrategia es la simplicidad de un mensaje directo, claro, conciso y honesto“.