Según se ha indicado mediante un decreto publicado este jueves 12 de noviembre, Chile modifica el estado de situación ante el cierre de fronteras establecido desde el 18 de marzo: a partir del lunes 23 de noviembre, se permitirá el ingreso de pasajeros extranjeros a través del Aeropuerto Internacional de Santiago.
El Decreto N° 500 del Ministerio del Interior y Seguridad Pública de Chile, publicado este jueves en el Diario Oficial, establece las condiciones iniciales de la apertura de fronteras. De esta manera, a partir de la última semana de noviembre, los viajeros internacionales podrán ingresar al país cualquiera sea el motivo de viaje, incluyendo así a los viajes por turismo.
Por el momento se ha detallado que solo estará habilitado el ingreso a través del Aeropuerto Internacional Arturo Merino Benítez, comúnmente llamado Aeropuerto Internacional de Santiago y Aeropuerto de Pudahuel. El mismo se destaca por ser el principal aeropuerto de Chile, ubicado al noroeste de la ciudad de Santiago. Con el paso del tiempo se irán abriendo otras terminales aéreas, pero hasta el momento allí los protocolos establecidos para los viajes aéreos son los que brindan mayores garantías.
Por su parte, el gobierno anticipó que, para el acceso de pasajeros extranjeros se exigirá un test PCR negativo realizado como máximo 72 horas antes del inicio del viaje, o un test realizado en el aeropuerto al arribo. Las personas también deberán completar una declaración jurada antes de embarcarse a Chile, en la que detallarán su origen y destino, así como también su condición de salud y la eventual presencia de síntomas de la enfermedad ocasionada por el COVID-19.
Pero eso no es todo, sino que los protocolos de control continuarán una vez que los visitantes estén en territorio chileno: 1uienes lleguen desde el exterior deberán descargar la app de rastreo que las autoridades pondrán a disposición y notificar diariamente su situación sanitaria por un máximo de 14 días.
Tal como ha sucedido con otros países de la región, la apertura paulatina de fronteras se da en el marco de la proximidad a las vacaciones de verano. Cabe destacar que el cierre de fronteras, decretado el pasado 17 de marzo en Chile, restringía el acceso solo a habitantes nacionales y extranjeros residentes, por lo que la industria del turismo se ha visto fuertemente afectada.
La temporada de esquí estuvo completamente perdida para los trabajadores hoteleros, gastronómicos y de empresas prestadoras de turismo, y ahora espera remontar las millonarios pérdidas con el inicio del verano austral. En alusión a esto último, y por su parte, el Parque Nacional de Torres del Paine, una de las áreas más turísticas del país ubicada en la Patagonia chilena, anunció también este jueves que abrirá sus puertas el 26 de noviembre tras casi ocho meses de permanecer cerrado.